Cuando el arte cura

El arte llega a los hospitales para crear un entorno más cálido y reconfortante

En una de las salas del hospital La Princesa de Madrid una pared verde resalta entre los típicos colores neutros de los hospitales. En ella, bajo el título de Lumière et vie (Luz y vida), se habla de dos conceptos: el impresionismo y el healing environment. Pero, ¿qué tiene que ver una cosa con la otra? Y ¿qué es esto de healing environment?

En la pared se explican las características principales de este movimiento artístico (el tratamiento de la luz, los colores luminosos, la falta de definición, el plenairismo, etc), y se menciona a algunos de los pintores más reconocidos de esta etapa. 

Sisley fue un pintor impresionista franco-británico, conocido principalmente por sus paisajes. Renoir, uno de los pintores más destacados del impresionismo, se especializó en retratos y escenas de la vida cotidiana, a menudo llenas de alegría y calidez, como reuniones sociales, jardines o fiestas. A Monet le debemos, nada más y nada menos que el mismísimo nombre del movimiento, pues proviene de su obra Impresión, sol naciente. Solía pintar jardines, nenúfares y paisajes urbanos. Guillaumin, amigo de Cézanne y Pissarro, fue una influencia para movimientos posteriores, como el fauvismo, gracias a su uso del color. Hassam, estadounidense, trasladó las técnicas impresionistas europeas a Estados Unidos a través del grupo «Ten American Painters». Lebasque, entre impresionista y postimpresionista, pintaba asombrosas escenas de la vida cotidiana y retratos. Y ya que estamos, también me gustaría dar alguna pincelada (nunca mejor dicho) de Renoir y Monet. Estos sí me suenan bastante más, e imagino que a mis lectores también. 

Esta pared no está ahí por casualidad. Forma parte de una tendencia que está cobrando fuerza en muchos hospitales del mundo: el uso del arte para mejorar el estado de ánimo de los pacientes y de los familiares que los acompañan. Es lo que los expertos llaman un entorno curativo (o healing environment). Estar rodeado de arte puede reducir los niveles de ansiedad, mejorar la percepción del dolor y contribuir a una recuperación más rápida. 

Y de entre tanto arte, tantas tendencias, tantos movimientos, ¿por qué el impresionismo? Este parece una elección ideal, ya que los cuadros suelen reflejar paisajes tranquilos, escenas de la naturaleza o de la vida cotidiana con colores vibrantes que, en un hospital, puede verdaderamente subir el ánimo.

Cada vez más centros de salud en España y en el mundo están apostando por integrar el arte en sus instalaciones, como es el caso del Hospital Gregorio Marañón, también en Madrid, que organiza exposiciones temporales. 

Esto no solo beneficia a los pacientes, sino también al personal médico. El Cleveland Clinic en Estados Unidos, por ejemplo, ha integrado obras de arte de más de mil artistas internacionales, como parte de su iniciativa Art and Medicine. 

Quién me iba a decir que una simple pared despertaría mi curiosidad sobre el arte y la salud. Y es que, aunque no nos cure directamente, el arte nos recuerda que somos más que cuerpos, y que la sanación también pasa por alimentar la mente y el espíritu.