Una semana después que ganaran la serie mundial, en la entrada del estadio de los Dodgers siguen llorando la muerte de su leyenda Fernando Valenzuela con un altar con flores. El mexicano fue una estrella en la ciudad y lo querido que era no se puede describir con palabras.
En la víspera de una de las elecciones más igualadas del país, la ciudad de Los Ángeles tuvo un día para desconectar de este panorama electoral. Con un desfile a lo largo del downtown, el equipo paseó arropado por las masas que teñían de azul todas las calles.
Este era un desfile muy importante para la ciudad porque habían pasado más de 40 años desde la última vez que pudieron celebrar equipo y afición juntos un desfile, como afirmaba a Tressesenta una aficionada: «La ciudad está unida, y era importante disfrutar tras muchos años sin hacerlo». Arrancando en el ayuntamiento los jugadores fueron recorriendo varias calles del downtown para finalizar el paseo en la quinta avenida. Luego todo finalizaria en el estadio con una gran fiesta entre equipo y afición.
Ha sido la única forma de celebración que han usado los angelinos para dedicarle a su leyenda mexicana en estos días preelectorales donde los ojos están puestos en el futuro del país de una potencia como lo es Estados Unidos.
Esta euforia contrasta con el ambiente que se vive en Los Ángeles, al ser el estado con mayor porcentaje de votos por correo, un 90%. Los centros electorales tienen poca afluencia de personas pero al final de la tarde antes de los cierres vendrán los últimos votantes a ejercer su voto en esta jornada electoral histórica en EE.UU.